viernes, 5 de junio de 2015

J.D. Salinger: El Guardián Entre El Centeno


Mañana del 8 de diciembre de 1980. Mark David Chapman después de abandonar su habitación en el Hotel Sheraton, compra en una librería cercana un ejemplar de “El guardián entre el centeno”. En una de sus hojas escribe “Esta es mi declaración” y lo firma bajo el nombre de Holden Caulfield, protagonista de dicha novela. Horas más tarde asesina a balazos a John Lennon cuando salía de su apartamento en el edificio Dakota.

Probablemente J.D. Salinger cuando escribió “El guardián entre el centeno” jamás pensaría que iba a convertirse en la obra de referencia de “ilustres” psicópatas de la historia de los EE.UU., aunque dada la personalidad del escritor es fácil intuir que este extremo no le habría importado ni lo más mínimo.

Lo que sí es un hecho es que años después de haber alcanzado fama y notoriedad con su inmortal escrito, decidió voluntariamente retirarse de la vida pública y convertirse en una suerte de ermitaño para, salvo alguna colección de relatos cortos, no volver a publicar jamás.