Mostrando entradas con la etiqueta Literatura. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Literatura. Mostrar todas las entradas

domingo, 1 de noviembre de 2015

Salman Rushdie: Los Versos Satánicos


Como bien saben Dan Brown o Mel Gibson, no hay nada mejor que una polémica de tintes religiosos para promocionar un libro o una película. Ahora bien, quizás Salman Rushdie hubiera preferido permanecer en el anonimato durante el resto de su carrera literaria a tener que vivir en una jaula de oro.

Corría el final de la década de los ochenta cuando el escritor hindú publicó la que sería su cuarta novela, “Los Versos Satánicos”, en la que mediante la fábula de dos actores que simbolizan al Arcángel Gabriel y a Satanás, reinterpreta ciertos pasajes del Corán de un modo que resultó altamente ofensivo para el mundo islámico, y que culminó con la explícita condena a muerte a cargo del Ayatolá Ruhollah Jomeiní, líder religioso de Irán, a todos aquellos que estuvieran vinculados con la publicación del libro. A día de hoy, dicha sentencia continúa vigente.

viernes, 5 de junio de 2015

J.D. Salinger: El Guardián Entre El Centeno


Mañana del 8 de diciembre de 1980. Mark David Chapman después de abandonar su habitación en el Hotel Sheraton, compra en una librería cercana un ejemplar de “El guardián entre el centeno”. En una de sus hojas escribe “Esta es mi declaración” y lo firma bajo el nombre de Holden Caulfield, protagonista de dicha novela. Horas más tarde asesina a balazos a John Lennon cuando salía de su apartamento en el edificio Dakota.

Probablemente J.D. Salinger cuando escribió “El guardián entre el centeno” jamás pensaría que iba a convertirse en la obra de referencia de “ilustres” psicópatas de la historia de los EE.UU., aunque dada la personalidad del escritor es fácil intuir que este extremo no le habría importado ni lo más mínimo.

Lo que sí es un hecho es que años después de haber alcanzado fama y notoriedad con su inmortal escrito, decidió voluntariamente retirarse de la vida pública y convertirse en una suerte de ermitaño para, salvo alguna colección de relatos cortos, no volver a publicar jamás.

martes, 3 de marzo de 2015

Hank Moody: Dios Nos Odia a Todos


Si hace unos años David Duchovny no nos hubiera regalado un personaje tan maravilloso como Hank Moody, él mismo hubiera terminado “protagonizando” su propio post en este humilde blog. Pero contra todo pronóstico y cuando nadie apostaba porque alguna vez consiguiera alejarse del celebérrimo Fox Mulder, consiguió sacarse de la manga este papel de un escritor inmaduro y adicto al desenfreno que pierde la inspiración tras considerarse incapaz de estar a la altura de la novela que lo encumbró: “Dios nos odia a todos”.

jueves, 4 de diciembre de 2014

Margaret Mitchell: Lo Que El Viento Se Llevó

“Dios sea testigo de que los yanquis no van a poder conmigo. Voy a sobrevivir a todo esto, y cuando termine todo no volveré a pasar hambre otra vez. Ni yo ni ninguno de los míos, aunque tenga que robar o matar. ¡Dios sea testigo de que nunca más voy a pasar hambre!”.
Probablemente sean muy pocos los que no hayan oído alguna vez este famoso juramento perteneciente a la novela Lo que el viento se llevó. Su autora, Margaret Mitchell ha pasado a la historia no sólo por dejarnos para la posteridad inmortales personajes como Escarlata O'Hara o Rhett Buttler, sino también por ser la pionera del actual fenómeno de literatura de masas (por fortuna para unos, por desgracia para otros).

Pero a diferencia de Michael Crichton, J. K. Rowling o Dan Brown, Mitchell no pudo prolongar su lucrativa carrera literaria puesto que en 1949 falleció al ser atropellada por un taxi mientras paseaba con su marido, hecho que conmocionó en su momento a toda la sociedad americana. No obstante (y a diferencia de J. Kennedy Toole), vivió lo suficiente para constatar el triunfo de su obra: 8 millones de ejemplares vendidos, traducida a más de 30 idiomas, premio Pullitzer y exitosa versión cinematográfica.

miércoles, 2 de julio de 2014

John Kennedy Toole: La Conjura De Los Necios


A lo largo de mi vida no ha habido muchos libros que me haya dado el gustazo de repetir su lectura. Uno de esos gloriosos ejemplos es “La Conjura de los Necios”, y desde una manera un tanto evangelizadora no me canso de recomendarlo a todos aquellos que parecen sufrir a la hora de abrir la tapa de un libro. Risas garantizadas.

John Kennedy Toole, es muy a su pesar mi primer one-hit wonder, puesto que después de tratar en vano que alguien accediera a publicar su novela, se suicidó inhalando el humo del tubo de escape de su coche, por lo que quien sabe si esto nos impidió poder seguir disfrutando de más genialidades como la que es esta novela.