Si hace unos años David Duchovny no nos hubiera regalado un personaje tan maravilloso como Hank Moody, él mismo hubiera terminado “protagonizando” su propio post en este humilde blog. Pero contra todo pronóstico y cuando nadie apostaba porque alguna vez consiguiera alejarse del celebérrimo Fox Mulder, consiguió sacarse de la manga este papel de un escritor inmaduro y adicto al desenfreno que pierde la inspiración tras considerarse incapaz de estar a la altura de la novela que lo encumbró: “Dios nos odia a todos”.
“Californication” es una serie que empezó a emitirse en el año 2007 a través del canal americano Showtime. Se encuentra producida por Tom Kapinos y el propio David Duchovny, y ha conseguido tras tres exitosas y avaladas temporadas, asentarse en el difícil panorama audiovisual americano. Su clave, unos personajes llenos de matices mostrados con un humor perspicaz y carente de tabúes.
La serie narra las “aventuras” de Hank Moody, afamado novelista de Nueva York que se encuentra indefinidamente perdido en el desarrollo de lo que tiene que ser su próxima novela, después de haber cautivado a crítica y público con su anterior obra “Dios nos odia a todos”.
Tras ser un éxito de ventas, alcanzando la categoría de best-seller, adaptan en Hollywood su novela con una película romántica llamada “A crazy little thing called love”. Así que cuando comienza el rodaje, decide mudarse a California con toda su familia para realizar un seguimiento a dicha adaptación. Pronto descubrirá que no tiene nada que ver con su obra, hecho que le afecta sobremanera y termina por inducirle una espiral de descontrol que culmina cuando su pareja decide separarse de él. A partir de entonces, junto a su agente y mejor amigo Charlie Runkle, inicia una nueva vida de tintes dionisiacos centrada en entregarse a todo tipo de placer, mientras lo compatibiliza con su obligaciones como padre y los continuos intentos por reconquistar a su ex mujer.
“Californication” consigue altas cotas de comedia gracias al perfecto equilibrio que mantiene su protagonista, Hank Moody, siempre al borde del abismo entre una fingida inmadurez y el deseo de sacar el mayor partido a la vida. Egoísta y tierno a partes iguales, nos invita a disfrutar de un universo personal en el que las relaciones personales son las protagonistas. Serie de obligado visionado que refleja mejor que ninguna otra, las vicisitudes de un one-hit wonder literario.
Fuente: Wikipedia.
Fuente: Wikipedia.